Diez kilómetros de costa rocosa encerrada por dos promontorios, Punta di Mesco y Punta di Montenero, que encierran cinco pueblecitos enrocados sobre terrazas de piedra en minúsculas caletas.
Fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997 y dos años más tarde se constituyó el Parque Nacional de Cinque Terre que abarca los cinco pueblos: Monterosso, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore.
Manarola
Data también del periodo romano y su nombre proviene de "Manium Arula“, que significa Templo de los Manes, los dioses romanos de la casa.
Se encuentra algo más oculto en la costa, elevado en oscuros riscos y con el puerto encerrado entre dos espolones rocosos y coronado por las típicas terrazas naturales llenas de casas de colores.
Manarola es el más tranquilo de los cinco pueblos porque fue descubierta más tarde por el turismo. En ella se puede gozar de agradables paseos relajantes, sobre todo la Via dell’Amore, que une Manarola y Riomaggiore, un camino en la roca al borde de un acantilado sobre el mar